3 jun 2011

Buenafuente

Me gusta Buenafuente, así de claro. Lo veo por la noche, del sofá a la cama. Imagino que le gusta quedarse con su camisa negra, desabrochada por completo y slip a juego que se quita él mismo. Yo no llevo nada bajo mi vestido de tirantes. Él elige subirme la falda, yo elijo encima. Sin gafas mira tratando de enfocarme, me recorre con su perilla y sus manos agarran mis dos mitades. Desde este ángulo elevado me veo con él, con el mismísimo Buenafuente en mi cama de dos por dos.
Sibila