26 nov 2012

Tunnick

Ya estuve en 2006 en una perfomance de Tunnick, acudí a Barcelona gracias al chivatazo de una amiga. Y la experiencia fue, cómo diría yo? risueña y profesional al mismo tiempo.



Me encanta el chocolate con una pizca de chile. Los dos en la cocina, de risas y dulces. Tarde de invierno no necesita más, añadiría sí unas buenas vistas, una vista escultórica.
Tanta belleza junta que me entra el síndrome de Stendal…

Sibila

8 oct 2012

Sin título



Hay vivencias que no se superan, se salta por encima de ellas para dejarlas atrás, sólo eso. La ira, la destrucción, la vergüenza y la sensación de estar presente pero no existir; nada hay peor para la persona que vivir con el verdugo del suplicio.
Cuando crees que toda lucha justifica los medios, ummm entonces es que estás en medio del proceso desequilbrador.


Cuando la vida del otro no es doble vida sino vida paralela, entonces uno de los tres sobra. Porque la duplicidad en la persona que deseas es buena, pero en la persona amada resulta detestable.


Sibila

2 sept 2012

Pelea de lobas


Mi varón la cogió primero de los brazos, luego la cara, el pelo, una patada en los riñones. Estoy segura de que algunos ojos extraños nos vieron u oyeron a través de las paredes. 

- pelea de manos
- cuando ya me iba llegó la poli, y ella con la nariz sangrando
- se la llevaron en ambulancia.
- En el coche policial mi pepito grillo no veía manera de evitar una denuncia por lesiones.
- Me tomaron declaración en comisaría y estoy ya fichada. El abogado que me adjudican guarda todos los papeles. Yo estoy jodidamente obnubilada.
- He de esperar la citación del juez o bien me llamarán al juzgado.
- A ella le meterían varios metros de venda por la nariz y listo, se corta la hemorragia y a casita.
- Puede denunciarme si quiere, claro que también podría quitar la denuncia. Se ratificaría en el juzgado y c’est fini. No quiero que la quite.
- Puedo vivir con mis antecedentes policiales, pero ¿podría yo sobrevivir con penales?



25 jul 2012

Muuuuu 7


Mi vida se ha convertido en un simulacro de nuestra pasada vida común. 
En mi cabeza sólo habitan visiones de ella y nunca conmigo, jamás.
Callo y bajo los ojos. ¿Hasta dónde puede bajar los ojos una persona, pueden los ojos arrastrarse por el suelo? Los míos sí.

Los lapsus hacia su otra vida no me dejan ver el tráfico, cualquier día me atropellará el tranvía.
He esperado semanas a que ella advierta mis signos de decadencia. No sirven mis cualidades femeninas.



Ojalá mañana me despertara varón para reaccionar como ellos, sin remordimientos.
Sibila

9 jul 2012

Muuuuu 6

Me mortifico, conservo dentro la peor sensación para no olvidar un estado terrible, atada al disgusto continuo.

Los descubrí juntos ante una mesa pequeña y dos cafés. Durante unos minutos eternos no supe qué hacer ni cómo reaccionar. Pasar de largo? Atacarlos? Montar una escena? Esconderme?
Estoy viviendo el día de veinticuatro interminables horas junto a una persona que es mitad imaginación mía y mitad una desconocida.

La otra vida de Y es dónde -yo creo- ella halla placer sin culpabilidad moral ni sentimental, donde no es consciente de mi existencia. Ella llena su vida de sucesos a mis espaldas. Usa nuestros lugares comunes con otras personas –hombres varones-,  nuestra mesa de la cocina, nuestra escalera, nuestra ducha. Hombres que se me aparecen como sombras.
Cuando estamos las dos entre las sábanas, sin ropa y tentando, ella pone excesivo cuidado en decir mi nombre junto a mi apellido. Sí para que no se le escape otro nombre impropio. Cada una mis seis letras de mi nombre se me clavan, ís punzadas en el corazón.



Yo me había hecho una idea diferente de mí misma, queriendo una recompensa conforme a mi esfuerzo con ella y resultados. Pero no, caigo en hundimiento titánico. Lo peor es la decepción intrapersonal, las ilusiones que han pasado del verde al marrón muerto y putrefacto.
No soy, no soy nada, ni hueco en el colchón. Floto en el aire mientras el desencanto me consume.


Sibila

19 jun 2012

Muuuuu 5

Ella tiene otras citas después de estar conmigo, citas superpuestas, mentiras en definitiva.
Yo tejo las tramas más sencillas en sus escenas imaginadas durante las horas que ella debería haber compartido conmigo. Decenas de excusas a diario, mentiras, así mi agenda y la suya se complementaban llegando a dormir cuando yo ya me había secado de llorar como un cactus. Soy ya cactus y pinchos, espinas y carne sema.
No veo ni luna en la noche.



Sibila

14 jun 2012

Muuuuu 4

Leo y releo una nota recibida cuya destinataria no era yo, pero el dolor intenso se repite, forzosamente me aferro a esa angustia para no olvidar qué tortuosa es ya nuestra relación.

Nada hay más delator que una respuesta así, delante de mis oídos:  “hola, sí, estamos en la fila del súper”, mmm, claro, eso es. Claro y meridiano: el amante.
Encontrar un pelo excesivamente rubio en el respaldo del sillón de orejas, no podía ser mío.
Los espectros amantes bailando a mi alrededor, dejándome hecha trizas.



A veces los imagino con ella, encima de ella o ella encima de los fantasmas amantes. Yo siempre me colocaba fuera, observando la visión copulativa, viendo su cara sonrojada, desencajada por el esfuerzo de empujar e inventar una cara nueva hacia mí.

Sibila

28 may 2012

Muuuuu 3

Cuando una busca la supuesta verdad, a veces se deja convencer por puro agotamiento o por cobardía. Entonces aún quedo más alicaída que si obtuviera la confirmación de la sospecha.
Busco más pistas, pero no encuentro y aún enfurezco más, no me tranquiliza, al revés, necesito confirmar mis sospechas, encontrar la evidencia de un pelo que no es mío, repensar dónde buscar.
Necesito encontrar los frutos deseados y sufrir y confirmar con un instantáneo retortijón fortísimo en mis entrañas y correr al retrete perdiendo la vida.



Ah, sí, sí, sí, mi intuición satisfecha: otra persona, sí, al fin. Parezco la ganadora, pero no.

Silbila

25 may 2012

Muuuuu 2

No tengo explicaciones ni para ella ni para mí misma.
Sólo el halo de vivir me mantiene un poco alejada de perder el juicio, un poco.



Silbila

13 may 2012

Muuuuu

Claro que sé cómo son los cuernos, nunca los llegas a talar del todo. La crueldad de su artífice, su desfachatez y traición quedan enraizadas en la cabeza. Con el tiempo verme en el espejo con esos cuernecillos puede resultarme hasta identificativo, al menos yo me obligo.
Claro que soy mujer despechada y mis amantes lo saben, así que les queda la ardua tarea de conocer qué sentimientos albergo para ellos -si acaso me quedara algún resquicio- o todo lo que siento es necesidad descabezada.



Me reconozco en ese sufrimiento que surge de las dudas respecto de una persona a quien he hecho centro de mis preocupaciones, fabulaciones infinitas. Veo la mentira en su rostro y también en sus ausencias. Cuando está delante de mí el aire se impregna del aroma a chantaje.
Se me para la respiración, el poco oxígeno que recibo me hace enloquecer, y al minuto siguiente me creo las explicaciones de su boca sólo por mi propio bien, para no caer aún más en la locura.

Sibila

7 may 2012

Regalo

Llega después de meses con un bono relax para las dos: ok, acepto por darle gusto aunque no me apetece nada.
Fuimos, miré todo con la desconfianza de la desgana, ella se aposentó como si conociera el lugar queriéndome hacer agradable el momento, dulcificando nuestra próxima vivencia a dos: una sesión de ictioterapia y un masaje reiki.
Intenté sonreir con la gracia y el asco plantificados en mi cara al mismo tiempo porque la idea de sumergir mis pies entre bichitos pequeños para que me coman la roña es poco menos que asquerosa. Pero sonreí y puse cara de fascinación.

El regalo resultó desfasado. Conocí los pececillos en la costa turca y me pareció exótico no, llamativo sí, pero no para repetir: los peces viven en ese agua perennemente, comen y defecan células muertas, mordisquean mi roña y la pasan a otros pies más o menos bellos, sucios o limpios que los míos.  Los hongos la gozan en esa agua templada.



Ella sonreía entusiasmada, yo teatralizaba una buena cara.
Y para acabar un masaje energético, que estuvieron de moda en los noventa pero ya no. Ella creía que esto me a devolver las ganas y la pasión, pero mi pero es tan hondo como amplio el cielo.
Agradezco el doble regalo, claro que sí pero llega fuera de hora. Esto ya está out, ahora se llevan los masajes con los ángeles de la guarda. Aviso.

Sibila
Nota: qué gusto despacharse así con un regalo.

19 abr 2012

Caída

Se me acojonó, le preparé un escenario donde yo era plato único en bandeja de blonda. Y se me vino abajo, huyó despavorido. Debió de pensar que tendría que darme el 200% y falló.



Adherí mi dildo a la pared y soportó la mejor visión del interior de mis muslos.
Cabiria


3 abr 2012

Yogur

Le esperé arriba, con la puerta abierta y un bote de yogur en la mano. Bajo mi vestido: mi piel, mis pezones estaban casi fuera del vestido.



Me lo llevé al sofá con la camisa desabrochada, todo lo demás se quedó en la entrada perfectamente colgado sin arrugas delatadoras.
Hundí mi lengua en el yogur para embadurnar su punta sobre la que me senté sin espera. Obedeció a cada uno de mis movimientos. Cuando estuvo a punto de explotar por primera vez me agarró de la cintura fuertemente para dejarme en el suelo, cara a cara. Batiendo el yogur entre ambos cuerpos, embate perfumado. Aprisionando su cuerpo con mis piernas. Mmmm.
Espera aún quiero más.

Cabiria


24 mar 2012

Oriente

Me ha bañado en la ducha, suave y cálidamente. Todo olía a cereza, sus manos, mi piel y el vapor. Mientras yo me dejaba ella silenciosa recorría cada centímetro pasando de la higiene corpórea al tacto sutil y al ensueño.



Sibila

21 mar 2012

De compras 2

Como una compradora compulsiva acudo a la calle en busca de mi comprador, a veces espero en el portal a que llegue, la fantasía del ascensor es irresistible.
No llevar ropa agiliza las manos, la boca y la compra. El juego del calabacín fue más que sensual, húmedo.
Me guardo el yogur para otra compra.



Cabiria

7 mar 2012

Marketing

Ella se promociona con sus ajustados corsés comprados en Martha Peters, yo con mis ojos verdes.



Su visión y mi mirada pertenecen al mismo acto de compra.
En la era de la visión todo vale para ser admirado.
La comida entra por los ojos, siempre.

Sibila


29 feb 2012

De compras

Compramos a la misma hora para perseguirnos por los pasillos del súper.
Sé que compra para dos, pero él sigue mi ajustada falda hasta el arcón del frío. Nos volcamos a por el mismo paquete y chafo mi escote sobre su brazo. Pasa por detrás, el pasillo es tan estrecho que es inevitable empujar mi apretada falda a su abultado pantalón.



3 semanas, no se pudo prolongar más este dance urbano dentro del supermercado. La tercera me ha seguido a casa cargado con sus bolsas sin abrir la boca ninguno de los dos. No llevar ni tanga desprende un atractivo irresistible para el tren inferior de los tíos.
Llamo al ascensor, se abre la puerta y entro la primera. Ya dentro elevo mi rodilla hasta sus huevos y él desliza su mano por encima de mis tetas. Podría correrme allí mismo.
Cabiria

24 feb 2012

Flor carnívora

Como una flor carnívora atrapo su dedo, que no hubiera paseado tan cerca!!!



Lo conservo caliente masajeando desde la base su falange y con el deseo de que otro dedo más entrara para acompañarle.
Con dos se puede jugar a bailar por dentro, danzar y dar vueltas como en un vals a dos.

Sibila

12 feb 2012

Resultados

Llegaste agotado, lo vi en tu ánimo, cansado del día a día, tu energía desahogada en mi fue lo mejor que te pasó en este primer mes de año.
Te insinúas y yo te acojo, te acepto. Fuera los histerismos de tu mujer habitual, no nos hacen ningún bien.  Conmigo puedes desnudarte, no escucharé las banalidades de los hombres de palabra fácil.

Yo me defino por mis relaciones, tú por tus resultados.



Cabiria

31 ene 2012

Fondo de armario

He tenido que recomponer el cajón ropa interior: las tallas extra por grandes quedan tan mal como las extra por pequeñas. Llevar las tetas colgadas de las amígdalas refleja baratez y los sujetadores estirados o viejos delatan poco gusto por el sexo.
El fondo de su armario se oculta con las capas invernales lo mismo que su figura: dos camisetas y un jersey, una falda corta sobre un pantalón pitillo y vestidos sin talle.


Pero qué triste se me aparece el invierno en esta ciudad, la gente deforma sus curvas bajo el gris plomizo de la niebla perdiendo la color y el calor de la carne.

Sibila


25 ene 2012

Quijada

A 17 años basta con rozarles el pene, a los 43 necesita además caricias. Media hora chupando, al final me duele la quijada.



Eih!!! Respira, no siempre es placentero hacerme llegar arriba si el ascenso no ha sido bueno.

Cabiria


18 ene 2012

Látex

Tiene un soberbio escote que provoca imágenes eróticas desfilando ante mis ojos. He de sofocar la voz tumbada en la alfombra, ondeando mi espalda en silencio y en un ahhh!.
Prefiero la amplitud del suelo radiante a los choques contra el colchón de látex donde el esfuerzo por rebotar me enfada.
Mis piernas se curvan abiertas conmigo dentro, primero un dedo se desliza, luego otro más, saliva humedecida, un escalofrío me recorre. Casi no puedo ahogar mis ganas, he de cerrar las piernas y aguantar, contando de uno a cinco expirando suave, perdiéndome de mí.
Es atléticamente bella y su pulsión me gana en la salida.



Sibila